HISTORIA

HISTORIA
El origen del billar y su evolución en el tiempo.

REGLAMENTOS

REGLAMENTOS
Despeja tus dudas con los reglamentos más comunes y descubre otros más raros, pero muy divertidos.

ESCUELA

ESCUELA
Conoce a fondo todo el argot del billar con nuestro completísimo diccionario con más de 460 acepciones.

CURIOSIDADES

CURIOSIDADES
Anecdotas, curiosidades, rarezas y estravagancias del billar.

025. CINE ❶: EL BUSCAVIDAS

viernes, 13 de enero de 2012




THE HUSTLER
 
 

FICHA TÉCNICA


DIRECCIÓN: Robert Rossen

PRODUCCIÓN: Robert Rossen

GUIÓN: Walter Tevis (novela), Robert Rossen

MÚSICA: Kenyon Hopkins

FOTOGRAFÍA: Eugen Schüfftan

MONTAJE: Dede Allen

REPARTO: Paul Newman, Jackie Gleason, Piper Laurie, George C. Scott, Myron McCormick

PAÍS: Estados Unidos

AÑO: 1961

GÉNERO: Drama

DURACIÓN: 134 min.

PRODUCTORA: 20th. Century Fox

Obtuvo 9 nominaciones a los Oscar
Mejor Película: El buscavidas (The hustler)
Mejor Director: Robert Rossen
Mejor Actor: Paul Newman
Mejor Actriz: Piper Laurie
Mejor Actor de reparto: Jackie Gleason
Mejor Actor de reparto: George C. Scott
Mejor Fotografía b/n: Eugen Schüfftan
Mejor Guión adaptado: Robert Rossen
Mejor Dirección artística b/n: Harry Horner

Consiguió el de Fotografía y Dirección artística.


OPINIÓN 

En la vida de todo aquel que ame el cine o simplemente con que le guste un poco hay una serie de películas a las que se vuelve una y otra vez, cada vez que se empiezan a ver se desea volver, y cada vez que se terminan deseas no volver para que esa vez no se acabe.

Esas películas son lo que llamamos "obras maestras". "El buscavidas" es una ellas.

Todo lo que aquí escriba sé que no le hará justicia, porque es una película que significa demasiado para mí, un sentimiento casi afectivo que es imposible describir con palabras, al menos, con palabras que la hagan justicia. Las miserias de cada uno de los protagonistas se refleja en cada escena, en cada dialogo y en cada silencio.

Maravillosa película, con una impresionante y necesaria enseñanza: no es en la habilidad concreta que uno domine donde se demuestra el éxito o el fracaso, sino en que los frutos que de ella obtenga sean sabrosos o estén podridos.

Paul Newman no interpreta. Eso, se mire como se mire es fingir. Haciendo que parezca sencillo lo dificilísimo, simplemente da vida al personaje, lo hace real y palpable. Miradas, gestos, y -sobre todo- sonrisas, traspasan el celuloide, la pantalla, y lo que haga falta, para crear un nivel de credibilidad pocas veces visto en toda la historia del cine. Eddie está vivo, deseamos conocerlo, soñar, amar y sufrir junto a él. Impresionante es decir poco.


A su lado, Piper Laurie decidió contagiarse de genialidad, y sabe darle la réplica con una muy dolorosa y convincente recreación de persona sola, débil, dependiente, y con fondos de nobleza, con quien es difícil no llegar a sentir auténtica pena. Esto si es cine.


George C. Scott, no necesita derrochar expresividad ni ademanes para componer el prototipo de cínico sin escrúpulos, que con una media sonrisa torcida o una mirada clavada en las pupilas, logra disimular intenciones o encontrar puntos débiles en sus presas. Uno llega a despreciarlo de verdad, y a eso en un actor se le llama talento.


Y Jackie Gleason, el último vértice del cuadro. Inolvidable su Gordo de Minnesota. Derrochando clase y elegancia. El rival que todos deberíamos tener alguna vez en nuestra vida, para poder esbozar una auténtica sonrisa de satisfacción de llegar a vencerlo. Magistral su interpretación, metáfora de los sueños que se quieren alcanzar.


Rodada en gloriosos blanco y negro, con toda su gama de grises -como la vida misma- no es una película que vaya a recomendar. Eso sería tan absurdo como decirle a alguien que algún día ha de morir. Todo el mundo sabe que tarde o temprano llegará a ese punto, y esta película es algo que cualquiera que bucee en el mundo de las películas gloriosas, llegará a descubrir, a gozar, y a admirar. Lo quiera o no.

Y es que siempre he tenido una atracción malsana por la figura del perdedor. Siempre, quizás inconscientemente, he dirigido mis caminos hacia emular, de alguna manera, ese nihilismo existencial del que entiende y comprende la languidez vital del fracasado. Del que gusta vivir la vida con la intensidad del desengaño.



EJERCICIO

A continuación, todo el que en pleno uso de sus facultades mentales quiera prestarse a participar en esta prueba empírica, que lea y siga con atención y detenimiento las siguientes instrucciones:

1.- Acomódate en tu sillón o butaca favorita.
2.- Introduce en tu aparato reproductor la película "El buscavidas" de Robert Rossen.
3.- Arroja con fuerza, lo más lejos posible, tus gafas de pasta. No las necesitarás.
4.- Si eres fumador o bebedor de whisky, provéete de uno o de ambos elementos.
5.- Inspira profundamente y dale al botón del PLAY y disponte a ver una obra maestra.
6.- Recréate en la oscarizada y exquisita fotografía en B/N de Eugene Schüfftan.
7.- Disfruta de la banda sonora. Aprecia esos clamorosos silencios que nos ofrece la película. Escucha el suave rumor de la bola rodando por el tapete del billar.
8.- Deléitate ante las memorables interpretaciones de sus 4 protagonistas.
9.- Paladea todos y cada uno de los diálogos. Empápate de su esencia, de su filosofía.
10.- Si después de haber seguido a pies juntillas los pasos anteriores no has disfrutado como un mandril ante este rotundo, brutal y apabullante ejercicio de CINE, descarta cualquier posibilidad de llegar algún día a adquirir el preciado status de cinéfilo. No tienes remedio, eres un caso perdido. Dedícate al macramé, la repostería o la papiroflexia.


VIDEOS

1. PRIMERA ESCENA

2. YO NO HAGO ALARDES

3. ESA SENSACIÓN...

4. ESCENA FINAL


EL LOCAL

El arranque y el cierre del filme lo ocupan dos partidas que transcurren en los Ames Billiards, calle 47 de Nueva York, sin embargo, en la novela de Walter Tevis acontecían en los Bennington´s (homenaje a la Bensinger´s Billiards Academy de Chicago). La primera media hora del film está dedicada al juego con más suspense de la historia del cine rodada en Cinemascope: las 25 horas de duelo entre Eddie Felson y el Gordo de Minnesota.



¿PERO SABÍAN JUGAR AL BILLAR?

Paul Newman no, Jackie Gleason si, (y de escándalo). Newman recibió clases de Willie Mosconi, el mejor jugador de la liga estadounidense de billar, ganador del Campeonato Mundial en 15 ocasiones. Mosconi, que en la película es el depositario del dinero de las apuestas y espectador en las partidas, se convirtió en el asesor técnico de El buscavidas y durante un mes se encerró con Newman y una mesa de billar. Durante una de sus exhibiciones (encontramos en el film un cartel descolorido de una de ellas) batió el siguiente récord: metió en las troneras ¡526 bolas consecutivas!



EL CASTING

Cuentan que Jackie Gleason y Willie Mosconi (sin desvelar su identidad) jugaron una partida de billar. Al finalizar, Mosconi le comentó a Robert Rossen que ya sabía qué actor encajaba a la perfección en el papel del Gordo de Minnesota. Menos mal que el actor que tenía en mente Mosconi para encarnar a Eddie Felson (Frank Sinatra) no coincidía con el de Rossen. ¿Se imaginan a Eddie Felson interpretado por otro actor que no fuese Paul Newman? Por cierto, todos los años, en diciembre, se juega la Mosconi Cup en Las Vegas, competición que disputan los Estados Unidos contra Europa. Willie Mosconi falleció en 1.993 de un infarto.


MINNESOTA FATS

Sigamos con Jackie Gleason, imbatible, elegante, con un clavel rojo en el ojal y su anillo de diamantes. Ver jugar al Gordo es una maravilla, comenta Eddie embobado, "parece que baila, que tocase un violín con sus dedos". Después del estreno de la película un jugador profesional de la época, Rudolph Walter Wanderone Jr. pasó a llamarse "Minnesota Fats", llegó a declarar que el personaje de Jackie Gleason estaba basado en él, Walter Tevis no tardó en desmentirlo, años más tarde lo hizo el propio Jackie.


14.1

Volvamos a la partida del principio. ¿A qué se juega en esta película?
Al 14.1 Continuo (Straight Pool). Cada jugador debe meter 14 de las 15 bolas (cantando la tronera a la que van y en cualquier orden) una después de la otra, cuando queda una sola bola se para el juego, se reponen las 14 bolas en la mesa y se continúa. Se anota un punto por bola metida.



NACIDO PARA PERDER

La forma en la que están rodadas las 25 horas de juego es de un virtuosismo abrumador: la luz, la puesta en escena, las miradas, las extraordinarias jugadas con la cámara colocada en el mejor sitio, los evidentes estados de ánimo de los personajes... Y cómo Eddie pierde los 18.000 dólares, que ya tenía en su bolsillo, por beber, y cómo el Gordo le demuestra por qué nadie le ha ganado en 15 años.









+++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++








0 comentarios:

Publicar un comentario